jueves, enero 19, 2006

Acuerdos y desacuerdos


J. G. A. / L. R. A. - Madrid
EL PAÍS - 19-01-2006

El Gobierno y los partidos catalanes trataron ayer la mayoría de los artículos del nuevo Estatuto, excepto el espinoso asunto del modelo de financiación, que en principio se tratará en las reuniones de hoy. Este es un resumen de los principales acuerdos y discrepancias que mantienen las partes.

- Justicia. Las negociaciones tuvieron una doble vía, en el Congreso y en el Ministerio de Justicia, donde se abordaron las enmiendas conjuntas de los partidos catalanes a la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Los tribunales superiores autonómicos serán la última instancia judicial y se reservará para el Tribunal Supremo la unificación de doctrina. Asimismo, el Parlamento catalán podrá designar a una parte de los miembros del Consejo de Justicia de Cataluña. Existe discrepancia sobre el traspaso a la Generalitat de los medios personales (secretarios, forenses y funcionarios) y respecto a algunos medios materiales

como cuentas de depósito o consignaciones judiciales. Continúan las diferencias sobre si el conocimiento del catalán debe ser un requisito o un mérito para los jueces. Hay pacto sobre la preeminencia del derecho civil catalán.

- Competencias compartidas. Se mantiene la redacción acordada el viernes que delimita las competencias del Estado y las de la Generalitat. Las normas de carácter básico del Gobierno, que deben cumplir todas las autonomías, tendrán rango de ley salvo en las excepciones que determine el Estado de acuerdo con la Constitución y el Estatuto. ERC e ICV interpretan que están salvedades quedarán delimitadas en el nuevo Estatuto.

En el artículo de las competencias exclusivas, Gobierno y partidos consensuaron una fórmula para incluir una referencia a las competencias reservadas al Estado que fija la Constitución en su artículo 149.

- Derechos y deberes. Los partidos catalanes han renunciado a la creación de una sala de garantías en el Tribunal Superior de Justicia, pero se reconoce la potestad -sin concretar- de este organismo para la tutela de estos derechos y deberes.

- Cajas de ahorro. Este asunto podría desbloquearse próximamente después de que los partidos catalanes aceptaran compartir con el Gobierno la "supervisión del proceso de emisión y distribución de las cuotas participativas [instrumentos financieron de las cajas para captar recursos]", que en el proyecto de Estatuto aparecía como una competencia exclusiva.

- Aeropuertos y puertos. Ambas partes negociadoras discutirán hoy esta competencia. Hay un principio de acuerdo para que los aeropuertos de Reus y Girona pasen a la Generalitat y se cree un consorcio para gestionar el de Barcelona. El traspaso se haría por la vía del artículo 150.2 de la Constitución.

- Selecciones deportivas. El artículo del proyecto reza que las selecciones podrán participar en competiciones oficiales. CiU se niega a suprimir "oficiales". Este tema se examinará hoy.

- Competencias pactadas. Gobierno y formaciones catalanas pactaron diversas competencias, como agricultura, industria, juegos, obras públicas y cultura. En este último punto, la parte catalana renunció a la titularidad exclusiva sobre los fondos del archivo de la antigua Corona de Aragón. También se halló una solución para compaginar el carácter exclusivo de supervisión en Cataluña del Síndic de Greuges con las atribuciones del Defensor del Pueblo.

- Otros desacuerdos. Rechazo del PSOE a traspasar a la Generalitat la capacidad para convocar referendos. Asimismo, el Gobierno y los partidos catalanes reclaman como propia la fijación de los horarios comerciales. Los socialistas también se niegan a que los parlamentarios autonómicos gocen de inmunidad como los diputados y senadores.

1 comentario:

Rafael del Barco Carreras dijo...

Dos años despues...

LAS “CAJAS DE AHORRO” CATALANAS.



Rafael del Barco Carreras



Transformarse en BANCOS PUROS Y DUROS no les ha sentado bien. De “instituciones benéficas” invirtiendo el ahorro popular en un 50% en “Deuda Pública o similar”, un mínimo en minicréditos personales avalados por dos “solventes”, y el grueso en hipotecas a doce años que no alcanzaban el 40% del valor, o selectos edificios de señoriales viviendas alquiladas a precios de favor a las poderosas clases medias y altas “oficiales”, a dedicarse a todo tipo de operaciones bancarias ha resultado una excelente idea para políticos y dirigentes, y muy “mala” para las instituciones.

Si el siglo diecinueve consolidó la industria catalana, el veinte, sus revoluciones y crisis, quebró todas las creaciones bancarias de sus ricos burgueses. Pero aquello no tiene nada que ver con lo actual, únicamente en el resultado, con evidentes diferencias, los actuales “banqueros”, o mejor “cajeros”, se sienten IMPUNES E INMUNES, aunque soplan vientos que afectan sus nervios. Existen denuncias por fragantes delitos de “cajeros” de segunda fila. No hace poco una sucursal de una caja en Gerona fabricaba créditos de hasta 20 millones de pesetas. Sociedades quebradas aparecían en los ordenadores y expedientes con relucientes balances y datos registrales “debidamente valorados”. El tema se halla “aislado” en silencioso sumario. Apenas una anécdota si se observan los créditos de las cajas en las últimas macroquiebras inmobiliarias. La "caixa dels trons"..

Una excepción, LA CAIXA. Su capacidad y potencia bajo la férrea dirección de sus selectos franquistas, Vilarrasau y Samaranch, la amurallaron ante las bárbaras huestes del progresismo y nacionalismo catalán capaces de fundir cualquier impresora de billetes, aunque algunas leyes han dinamitado varios de sus endogámicos pilares. El Poder fáctico por antonomasia en Cataluña rebasa por las cifras y su actuación a nivel nacional y mundial cualquier consideración local.

E irrumpe un personaje clave para crisis de gran calado, Narcís Serra, pretendiendo arreglar el gran desaguisado. La calificación de MOOY´S en “perspectiva negativa”, el despido del Director General, y la última captación de dinero, 1.750 millones de € en cédulas hipotecarias en el Mercado Mayorista de Emisiones, por la Caixa de Cataluña con intereses por encima de los aplicados, indican sin género de dudas que el “negocio” está en una desaforada huida hacía adelante al “coste que sea”, hasta que Corbacho y Montilla enderecen el entuerto convenciendo a su jefe Zapatero. Solo hace pocos meses se dedicaban esos importes a conquistar sillones en corporaciones, multinacionales o semimonopolios, anunciando además millones de ganancias en compraventas que más parecían la del diamante entre amiguetes que operaciones reales. Un calco en grande de la vieja época del Pelotazo.

Acabado un ciclo próspero en captación de dinero, se encuentran igual que el sector bancario de los 70 y 80, arrasado por el pillaje y las aventuras financieras de todo tipo. El arreglo es fácil, se fusionan, la caja resultante obtiene más dinero “oficial”, o se fusiona a la vez con la CAIXA, y se contabiliza el desastre en una cuenta, que se “provisionará o amortizará” durante décadas en que la inflación multiplicará por diez los números globales. Una jugada maestra para el gran Serra que conquistaría la tan soñada presidencia, el cargo más importante de Cataluña, President de la CAIXA. La “única”.