martes, febrero 21, 2006

La eléctrica alemana E.ON lanza una contra-opa sobre Endesa


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De acuerdo con al Presidencia de Endesa, según reconocen consejeros de la propia eléctrica española, la eléctrica alemana E.ON ha lanzado una contra-opa amistosa sobre el 100 por 100 del capital de Endesa. E.ON ofrece 27,5 euros por acción y todo en metálico, pero, ojo, advierte que reducirá del precio el importe del dividendo. Saben los alemanes, como saben hasta los porteros de Madrid, que Endesa prepara un super-dividendo con cargo al resultado y con cargo a las plusvalías realizadas en venta de inmuebles y de su participación en AUNA. Por tanto, y dependiendo de cómo se hagan las cuentas, la oferta real de E.ON podría descender hasta los 24 euros por acción o menos, lo que supondría seguir pagando menos que la actual cotización bursátil.

La única condición de los alemanes es hacerse con el 50,01% del capital de Endesa, es decir, con la mayoría. Ahora queda por saber cómo caerá el mazazo en Gas Natural. Hay que tener en cuenta que los principales socios de Gas Natural son La Caixa y Repsol YPF (y este ultimo asimismo controlado por La Caixa). Por tanto, el consumo de recursos propios que exigiría una contra-contra-opa podría resultar arriesgado, además de toparse con la oposición del Banco de España. En cualquier caso, un cierto ambiente de derrota reinaba entre los opantes tras conocerse la noticia de la contra-opa. Sin embargo, desde el Gobierno se animaba a La Caixa a lanzar un órdago.

Otrosí. Horas antes de que los delegados de E.ON presentarán la contra-opa ante la CNMV, el gobierno Zapatero aún blasonaba de que “ninguna eléctrica, privada o pública, se atrevería a entrar en España, en un sector regulado, contra el Gobierno de la nación”. Pues, al parecer, sí que se atreven. Esos portavoces gubernamentales daban a entender que lo tenían todo controlado, es decir, que se habían puesto en contacto con italianos franceses y alemanes para advertirles que nada de contra-opa. Ahora se ve el caso que les han hecho y el peso real que el Gobierno Zapatero tiene en Europa. Según la expresión popular, manda menos que un gitano en un juzgado. Así, enfrentado a Estados Unidos y objeto de pitorreo para la gran potencia europea, la soledad del Gobierno Zapatero es cada vez mayor en el mundo (ver editorial).

Y lo malo es que E.ON sólo es pública en algo menos de un 2,5% del capital, en manos del Estado de Baviera. Es el famoso truco alemán: no tienen compañías estatales: tienen empresas propiedad de sus gobiernos regionales o lander. Es como si aquí dijéramos que una empresa no es pública porque no pertenece a la SEPI sino al Gobierno regional de La Rioja. En otras palabras, a E.ON no se le puede aplicar el Decreto Rato de 1999, según el cual ninguna sociedad con participación pública puede disponer de derechos políticos por más de un 3% en una empresa energética española.





El líder de E.ON desprecia al Gobierno español

"Esto es una operación de mercado… avisamos ayer por la tarde al Gobierno e incluso hemos pedido una entrevista con su presidente”. Durante su rueda de prensa en España, Bernotat no respondió a ninguna pregunta comprometida. Quitando el dividendo, la oferta real es de 25,1 euros por acción

Gran espectáculo el del CEO y presidente del Consejo de administración de E.ON. Wulf Bernotat. De entrada, sin paracaídas, aseguró a los periodistas presentes que había informado al Gobierno español en la tarde de ayer, que “incluso” había pedido, cuánto honor, una entrevista con el Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que “ya veremos más adelante” si se produce. Don Wulf no dejaba de repetir que “esto es una operación de mercado”. Sí claro, pero sobre una empresa estratégica española, la mayor eléctrica del país y el primer productor nuclear, por lo que debe atenerse a la legislación española. Una periodista española, Cinco Días, le recordó que la Comisión Nacional de la Energía, debe dar el visto bueno a operaciones que cambian el mercado de un sistema regulado, pero Benrotat la despidió con pocas palabras: es Bruselas quien debe decidir sobre esto.

Más, el Decreto Rato de 1999, por el que una empresa pública no puede tener más del 3% de los derechos políticos en una empresa energética tampoco es problema: Al Estado de Baviera sólo le queda “poco menos del 3%” y está desinvirtiendo. Sí, pero todavía no lo ha hecho. Es igual, es una operación de mercado.

Y sí, don Wulf sabe que existen cosas como “las acciones de oro”, pero eso no le importa: es una operación de mercado.

¿El problema de que la justicia pro-competencia alemana impugnara la fusión entre E.ON y Rhurgas? Pues nada, pelillos a la mar.

La arrogancia del primer ejecutivo de E.ON se dejó ver en que ya daba la operación por finiquitada, cundo la OPA acaba de presentarse, y aún no se sabe si Gas Natural lanzará una contra-contra-opa. Es igual: “Estoy deseoso de acoger a todos los empleados de Endesa en nuestro grupo”. Luego añadiría, “en el seno de nuestro grupo”.

Por cierto, se va a endeudar hasta las cejas, pero eso no es problema. Los 29.100 millones de euros que le va a costar serán créditos bancarios, otorgados por un conjunto de bancos entre los que no figura ningún español, ni uno sólo, y capitaneados por el HSBC y, cómo no, por Deutsche Bank. Naturalmente, E.ON, quiera o no, se verá obligada a vender activos si no quiere que su apalancamiento le desborde.

La oferta es muy buena, naturalmente, aunque aún nadie se explica como el presidente de Endesa, Manuel Pizarro, advirtió que sus títulos valían 45 euros por acción y ahora ha aceptado 27,5%. Mejor, 27,5% menos el descuento del dividendo ya otorgado, que era de 2,4 euros. Por lo tanto, y eso si no se cuenta el dividendo (a lo mejor, ahora se suprime) la oferta real es de 25,1 euros pro acción. Pero no lo duden, el precio de valoración es muy justo. La verdad es que si lo comparamos con la OPA de Suez sobre Elctrabel, debería haber ofrecido 30 euros por acción; si la comparamos con lo que pagó Florentino por Fenosa, estaríamos rozando los 35 euros por acción, medido sobre Ebitda.

La coña mayor vino cuando el amigo Benrotat comenzó hablando de “Iberia”. Los periodistas españoles presentes pensaron que se refería a la compañía aérea, pero no : se refería ala península ibérica, que según él era un objetivo desde mucho tiempo atrás.

En el entretanto, Gas Natural sigue pensando qué decisión tomará y el Gobierno comprende ahora que no pinta nada en Europa, y que Ángela Merkel le ha tomado el pelo a José Luis Rodríguez Zapatero. Eso sí, si nuestras noticias son ciertas, el ministro de Industria, José Montilla, está dispuesto a luchar. Veremos.



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